A veces nos centramos mucho en cuidar y mantener sana y bonita la piel del rostro dejando un poco de lado la del cuerpo. También merece ser tratada con cariño para que tenga un aspecto bello y, sobre todo, saludable, por eso hoy vamos a ver 10 reglas de oro que te van a ayudar a conseguirlo
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- Cuando te duches, hazlo con agua no excesivamente caliente, ya que esa temperatura tan elevada puede deshidratar en exceso tu dermis. Tampoco estés muchísimo rato…
- Al terminar, aclara muy bien para que no quede ningún resto de jabón. Seca con la toalla pero no la frotes con fuerza, ve dando suaves golpes en los brazos, en las piernas, por todo el cuerpo… Tu piel de agradecerá algo de delicadeza.
- Si cuando sales de la ducha notas que tu piel está especialmente seca, utiliza jabones suaves en tus rutinas diarias. Elige aquellos que tengan componentes que repongan los lípidos perdidos, que además de repararlos harán que se pierdan menos durante la ducha.
- Es muy importante la hidratación. Una vez te hayas secado como te decía antes, aplica una crema hidratante por el cuerpo. Elige aquella que sea adecuada para tu tipo de piel.
- También debes exfoliar tu cuerpo de vez en cuando. Es bueno para eliminar capas de piel muerta que impiden que ésta tenga un buen aspecto. Además, ayuda a que los productos cosméticos que te apliques después hagan un mejor efecto.
- Cuando haga frío, abrígate y prótegete bien. El viento y las temperaturas bajas hacen que la piel se seque más, lo mismo que el viento, y puede hacer que sientas una especie de tirantez o hasta de picor. Cubre tus manos y tu rostro.
- Para estar correctamente hidratada y que tu piel tenga un aspecto más saludable y bonito bebe suficiente agua cada día. Pueden ser unos ocho vasos diarios, como referencia. También puedes incluir zumos naturales o infusiones.
- La alimentación es fundamental para tener una piel bella y sana. Debes comer frutas y verduras y productos ricos en antioxidantes. Todo influye y verás cómo si sigues una dieta equilibrada tu piel tiene un aspecto mucho más bonito.
- El descanso es muy importante para cuidar tu piel. Si no duermes bien ni las horas suficientes tu piel acusará esta falta de sueño y el cansancio.
- El tabaco causa estragos en tu piel. Pierde luminosidad, se apaga y no tiene brillo ni resplandece, además, favorece el envejecimiento prematuro.
La importancia de la protección solar
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Un aspecto que, por su importancia, merece ser tratado con mayor atención, es el de la protección de nuestra piel frente a los rayos solares. El sol nos hace sentirnos más vitales y llenos de energía, más felices, nos activa la producción de vitamina D y también la circulación. Pero siempre en pequeñas cantidades, y siempre yendo protegidos. El efecto de los rayos del sol es uno de los factores que propician un envejecimiento prematuro de la piel y también pueden conllevar alteraciones importantes que afecten a su salud, por no hablar de las complicaciones más graves que todo ello puede acarrear. Por eso, es muy importante ponerse protector solar cuando vayamos a estar expuestos a las radiaciones.
De este modo, la exposición al sol puede hacer que las arrugas aparezcan antes de tiempo ya que los rayos UV van desgastando las células que de manera natural están protegiendo tu piel. Asimismo, pueden aparecer manchas y tu piel se va a deshidratar, puesto que las células que se queman han de ser repuestas por otras nuevas, por lo que la piel va a perder humedad y aceites esenciales en el proceso.
